Pregorexia

Años tras año va cobrando relevancia el acompañamiento de la mujer en el parto, habilitando y respetando el papel activo que han de tomar la puérpera y su familia en el cuidado del embarazo y del/la recién nacidx.

En relación a ello cabe destacar que, como es bien sabido, el embarazo es en sí mismo un período altamente estresante por los múltiples cambios que se deben atravesar, no sólo a nivel personal, sino a nivel familiar también, constituyendo un período de gran vulnerabilidad para la mujer.

Una dificultad que puede surgir en el proceso de gestación es en torno a la alimentación. A partir de los cambios que se producen a nivel hormonal y corporal que afectan principalmente al peso y a la silueta, pueden empezar a aparecer temores en torno al número que muestra la balanza, por el miedo y rechazo al aumento de peso. Así, la gestante puede comenzar a darle cada vez más importancia a las características nutricionales, calidad y cantidad de los alimentos, como así también sentir una creciente necesidad de hacer cada vez más actividad física para alcanzar o mantener un peso deseado que puede no ser el saludable para la gestación. 

De forma progresiva, estas dificultades pueden llegar a constituir un trastorno de la conducta alimentaria en el embarazo, la PREGOREXIA. Éste se caracteriza por un intenso temor a ganar peso, acompañado por conductas restrictivas en la alimentación, que pueden implicar saltear comidas, realizar ayunos prolongados, comer solo alimentos light o “fitness”, aumentar la actividad física y utilizar otras estrategias para controlar el peso. También se caracteriza por un gran malestar ante los cambios en la silueta propios del desarrollo del embarazo. 

Entonces, teniendo en consideración que tanto el embarazo como el posparto son períodos de gran vulnerabilidad para la aparición de síntomas de desórdenes alimentarios es conveniente, ante la aparición de las dificultades mencionadas, consultar con un equipo especializado que pueda realizar un acompañamiento adecuado de modo de favorecer el poder vivir tan importante experiencia como el gestar hijxs con el mayor disfrute.

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